Vivenciar al Espíritu Viviente marca el comienzo del fin de la separatividad y el sufrimiento, cambio que las religiones denominan METANOIA (conversión, cambio de paradigma, más allá del NOUS) o MOKSHA (liberación). Pero la verdadera CONVERSIÓN, según la Espiritualidad Holística, no consiste en un mero cambio de denominación o de rituales, sino de dos pasos: 1) identificarnos con nuestro verdadero ser, y 2) darnos cuenta de que ese ser coincide con el de Dios.
“Tarde te amé, hermosura tan antigua y tan nueva, tarde te amé! Y ver que Tú estabas dentro de mí y yo fuera, y por fuera te buscaba!” (San Agustín, Argelia , s. IV-V)
“Qué es la Vida? El ser de Dios es mi vida. Sí por tanto mi vida es el ser de Dios, entonces el ser de Dios tiene que ser mi ser, y el ser esencial de Dios mi ser esencial, ni más ni menos.” (Meister Eckhart, Alemania, s. XIII)
”Mi propio Yo es Dios! Mi propio Yo es Dios!” )
“Yo soy Dios.” (Giordano Bruno, Italia, s. XVI)
“Verme a mí es verlo a Él,” (Manzur Al-Hallaj, Persia, s. IX y X)
”Entre Tú y yo, un yo está de más/ que la separación cese y que el Tú avasalle al yo!” (Manzur Al/Hallaj, Persia , ss. IX- X)
SOMOS SEIDAD, DIOS, UNO, YO SOY DIOS. SOLO EXISTE DIOS, SILENTE