«Dicen que antes de entrar en el mar / El río tiembla de miedo / Mira para atrás, mira todo el recorrido, desde las cumbres de las montañas, / el largo y sinuoso camino que atravesó, / entre selvas y pueblos… / y ve hacia adelante un océano / tan extenso / que entrar en él parece nada más / que desaparecer para siempre… / Pero no existe otra manera / El río no puede volver atrás / Nadie puede volver atrás / Volver atrás es imposible en existencia / El río debe arriesgarse / y entrar en el océano / Porque sólo al entrar / el miedo desaparecerá / porque recién entonces el río sabrá / que no se trataba de desaparecer en él / sino de VOLVERSE OCÉANO.» (Khalil Gibrán, Líbano, 1883-1931)
Comentarios surgidos en Meditación
(Ana, Bethania, Jorge, Julia, Leopoldo, María Marta, Rubén)
Crecer, crecer, hasta ser el Océano
Fuimos siempre y seremos siempre parte de este Universo
Cada parte es el Todo; el Océano es el río
El río ingresa en el Océano dejando atrás la historia del tiempo y del espacio
Hacia afuera soy río, hacia adentro soy mar
«Adentro» y «afuera»: Dios jugando
Quién puede diferenciar qué es río y qué es mar en las profundidades del Océano?
Todos los ríos entran al mar; el mar no rehúsa ningún río
Nos asusta ser tan grandes como el Océano
La inmensidad del Océano recibe cada día de mi existencia. Mi corazón no permite que yo me entristezca.
En el Océano energético somos Pura Conciencia